viernes, 26 de agosto de 2011

PICADILLO A LA HABANERA

La hermana Irina comparte con nosotras esta rica receta de su tierra, Cuba.
Ingredientes
250 gr. de carne de res molida
250 gr. de carne de
cerdo molida
250 gr. de jamón molido
½ taza de papa picadita
½ taza de zanahoria picadita
¾ de taza de alcaparras
1 cebolla grande
1 pimiento verde
1 pimiento rojo
3 dientes de ajo
1 cucharadita de sal
½ taza de salsa de tomate
¼ de taza de vino seco
½ taza de aceitunas
½ taza de uvas pasas
½ cucharadita de azúcar
¼ de taza de 
aceite
Instrucciones
Caliente el aceite y sofría los ajos machacados, la cebolla y los pimientos picaditos. Agregue las carnes y el jamón y cocínelo todo 10 minutos revolviéndolo para que no se pegue y quede bien mezclado. Añádale las aceitunas troceadas, los demás ingredientes y déjelo cocinar 20 minutos a fuego mediano. Si tiende a secarse, agréguele un poco de agua, sin que pierda su consistencia. Puede ponerle, en lugar de agua, unas cucharadas de zumo de naranja dulce, que logra que los vegetales incluidos absorban mejor el sabor del conjunto.
Este plato puede combinarlo con 
arroz blanco, plátanos maduros fritos y ensalada de lechuga y berro.

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HERMANAS

Un día, una mujer recién casada merendaba en casa de su madre. Hablaban de la vida, del matrimonio, de las responsabilidades y de las obligaciones de la vida adulta.

Pensativa, la madre le dijo a su hija:

“Nunca olvides a tus hermanas. Se volverán cada vez más importantes a medida que vayas envejeciendo. Aunque ames profundamente a tu marido, y a los hijos que iréis teniendo, siempre necesitarás a tus hermanas. Intenta hacer cosas con ellas de vez en cuando y compartir momentos de la vida. No olvides que hermanas significa todas las mujeres: tus amigas, tus hijas, tus compañeras y todas las que forman el grupo femenino de tu familia. Las necesitas.”

¡Menudo consejo, pensaba la hija, pues estoy recién casada, y mi marido y la familia que vamos a crear juntos será sin duda lo que dará todo el significado a mi existencia.

Sin embargo, intentó seguir el consejo de su madre. Guardaba contacto con sus hermanas, y cada año tenía más amigas que el anterior.

Fue pasando el tiempo, y poco a poco se dio cuenta de que su madre había sabido darle el mejor consejo, pues cuando se producían cambios en su vida, sus hermanas se convertían en pilares de gran ayuda.

El tiempo pasa, se va viviendo la vida, la distancia separa, los niños crecen. Los seres queridos van muriendo, los corazones se rompen, y las carreras se terminan.

Pero…las hermanas permanecen, pues ni el tiempo ni la distancia cambian nada. Siempre hay una amiga cerca de ti cuando la necesitas. Cuando tengas que cruzar el valle solitario , habrá mujeres en tu vida que estarán a tu lado para animarte, para orar por ti, para ayudarte, para tomarte en sus brazos.

Amigas, hijas, nueras, nietas, hermanas, cuñadas, madres, abuelas, tías, sobrinas, vecinas, todas bendicen tu vida. El mundo no sería el mismo sin esta complicidad entre mujeres. Nos necesitamos las unas a las otras. (Autora anónima)